¡Ser la Verdad, y ver, oír y sentir la Verdad en otros!
¡Amada, poderosa y victoriosa Presencia de Dios I AM en mi, (justo dentro de mi corazón latiendo), amada gloriosa Madre de la Verdad para este Sistema (Amada Vesta), amada Diosa de la Verdad Palas Atenea, amado Maestro Ascendido Hilarión, y todos los que sirven a la Verdad en los Ámbitos Ascendidos de Luz Cósmica, os amo! Sinceramente os bendigo y agradezco por todo vuestro paciente y amoroso servicio para esta Tierra y sus evoluciones, y por sostener al menos un remanente del recuerdo de esa Verdad perfecta de la que todos vinimos, y a la cual todos regresaremos algún día.
¡Hacedme y mantenedme lo bastante fuerte como para ser la Verdad a través de mi propio ser, y para ver, oír, y sentir esa Verdad en otros! Ayudadme a conocer y a creer únicamente en aquello que es verdadero, y hacedme y mantenedme Divinamente justo conmigo mismo y con otros, mientras camino los senderos de la Tierra. ¡Que vuestra Luz de la Verdad encienda una poderoso foco ante mi, iluminando mi camino y el de todos los que yo contacte, y que esa Luz me guíe avanzando más y más hasta que yo alcance mi meta: la Ascensión, al interior de la Luz de todo lo Verdadero, eternamente libre!
Conscientemente acepto esto hecho ahora mismo, con pleno poder, sostenido por siempre, todo-poderosamente activo, y siempre en expansión.
Diario del Puente a la Libertad. Septiembre de 1956.
